Kim Novak, la legendaria protagonista de Vértigo, será homenajeada en el festival de cine de Venecia
A los 92 años, Kim Novak, la legendaria estrella de ...
A los 92 años, Kim Novak, la legendaria estrella de Vértigo recibirá el León de Oro del Festival de Venecia en reconocimiento de su trayectoria en la pantalla grande. La actriz, que trabajó con algunos de los directores más destacados de la historia del cine como Alfred Hitchcock y Billy Wilder, también asistirá a la muestra para acompañar el estreno mundial del documental Kim Novak’s Vertigo, de Alexandre Philippe. El film repasa su vínculo con la película que la hizo mundialmente famosa, su historia personal y las razones detrás de su decisión de retirarse de la actuación para dedicarse a las artes plásticas en las últimas cinco décadas. En 1997 la intérprete había recibido un Oso de Oro honorario del festival de cine de Berlín.
“Estoy profundamente emocionada por recibir el prestigioso León de Oro de este respetado festival de cine. Ser reconocida por mi trabajo a esta altura de mi vida es un sueño hecho realidad. Voy a atesorar cada momento que pase en Venecia. Me llenará el corazón de alegría”, declaró la actriz apenas se anunció el reconocimiento que recibirá en la nueva edición del festival que ya había revelado que también celebrará la trayectoria del director e intérprete alemán Werner Herzog.
Curiosamente, este parece ser el año del redescubrimiento de la figura de Novak: además del premio y el lanzamiento del documental sobre su vida, la actriz también volverá a estar en el centro de la escena gracias a Scandalous!, un largometraje de ficción dirigido por Colman Domingo que explorará su trágico romance con el artista negro Sammy Davis Junior, un secreto a voces en el Hollywood de los años sesenta que casi destruyó la vida y la carrera de ambos. La popular Sidney Sweeney será la encargada de interpretar a Novak, mientras que el intérprete británico en ascenso David Jonsson, encarnará a Davis Junior.
Una rebelde en Hollywood“Sin buscarlo, se convirtió en una de las leyendas de la pantalla grande: Kim Novak fue uno de los más amados íconos del Hollywood de los años cincuenta. Desde su debut a mediados de la década hasta su prematuro y voluntario exilio de la jaula dorada de Los Ángeles, ella nunca tuvo miedo de criticar al sistema de los estudios y el modo en que le elegían sus papeles, se inmiscuían en su vida privada y hasta con su nombre”, escribió Alberto Barbera, director artístico del festival de Venecia. Barbera también recordó en su comunicado que a comienzos de su carrera la actriz había sido obligada a cambiar su nombre real, Marilyn Pauline, porque según los mandamases de Hollywood Marilyn había una sola y era Monroe. Habiendo perdido esa batalla, Novak sí logró conservar su apellido aunque solo después de aceptar teñirse el pelo del tono rubio platinada para conformar a los ejecutivos, un cambio que resultó en su marca registrada para los espectadores de todo el mundo.
“Independiente e inconformista, ella creó su propia compañía de producción y protestó para poder renegociar sus salarios, que eran mucho más bajos que los de sus coestrellas masculinas. Gracias a su exuberante belleza, su habilidad de darle vida a personajes que eran inocentes y discretos al mismo tiempo que sensuales y atormentados con una mirada seductora y a veces triste, Novak fue admirada y la musa de directores como Billy Wilder (Bésame, tonto), Otto Preminger (El hombre del brazo de oro), George Sidney (Melodía inmortal, Lágrimas de triunfo, Sus dos cariños), y Richard Quine, con quien hizo inolvidables comedias románticas (La casa número 322, Sortilegio de amor, Vecinos y amantes, Mi bella acusada). Pero su imagen quedará por siempre asociada con los personajes que interpretó en el film Vértigo, de Alfred Hitchcock, que se convirtieron en el papel de su vida. Este León de Oro es para una rebelde en el corazón de Hollywood, alguien que iluminó los sueños de los cinéfilos por décadas antes de retirarse a su rancho en Oregon para dedicarse a sus pinturas y sus caballos”, concluyó Barbera sobre la inolvidable estrella que en 2025 está ansiosa por regresar al centro de la escena.