La alianza de radicales y libertarios busca un triunfo por más de diez puntos en Mendoza
MENDOZA.- En medio de una campaña provincializada y encapsulada, con escasos debates y propuestas, el oficialismo mendocino, liderado por el radicalismo, en alianza con La Libertad Avanza (LLA), a...
MENDOZA.- En medio de una campaña provincializada y encapsulada, con escasos debates y propuestas, el oficialismo mendocino, liderado por el radicalismo, en alianza con La Libertad Avanza (LLA), aguarda el triunfo en los comicios de hoy, una de las pocas jurisdicciones del país donde el presidente Javier Milei respira más tranquilo.
Sin embargo, con la crisis económica y política de fondo, las expectativas son menos ambiciosas y el propio gobernador, Alfredo Cornejo, considera que la diferencia con el segundo será “satisfactoria” si supera los 10 puntos, cuando hace un par de meses se entusiasmaban con una brecha muy superior, confiados en que obtendrían cerca del 60% de los votos.
De acuerdo a los sondeos previos, que se fueron ajustando con el paso de las semanas y los escándalos a nivel nacional, al ritmo de la volatilidad del mercado y los problemas de bolsillo, esas previsiones iniciales pasaron a marcar una sensible baja en los números del oficialismo, que ahora rozaría el 40% de los sufragios, y una recuperación en el peronismo, que dejaría el piso histórico del 15% para acercarse al 25%.
Con estas estimaciones, con 5 bancas en juego, se perfila el ingreso a la Cámara de Diputados de la Nación de 3 legisladores del oficialismo y 2 del justicialismo, aunque, a la hora de los datos finos, dependiendo de los resultados finales, se abre una posibilidad de que una tercera fuerza, como el Partido Verde o Provincias Unidas, arrebate un escaño y logre meter al primer postulante de la lista.
Fue un proceso proselitista “cuidado”, sin sobresaltos, con poca presencia de los candidatos en las calles y en la deliberación pública, más allá del alcance que tuvieron en las redes sociales, y de la visita de Milei a comienzos de octubre. Hay que recordar un dato: en las elecciones presidenciales, el líder libertario obtuvo más del 70% de los votos en la tierra cuyana. Ahora, el escenario no es tan holgado, y las duras exigencias iniciales de LLA, que de igual forma llevaron a Cornejo a firmar la alianza, con predominio del color violeta en las listas, quedaron matizadas.
Fue común ver una campaña del oficialismo con dos cabezas: por un lado, al gobernador haciendo inauguraciones y recorridas entre semana, y al principal candidato, el ministro de Defensa de la Nación, Luis Petri, los fines de semana. En las últimas jornadas el funcionario nacional, quien abandonó la UCR para pasarse a las filas de LLA, tuvo mayor participación en los movimientos, pero incluso no siempre junto a Cornejo, llegando a estar en actos separados en una misma jornada.
Además, el cierre del proceso se dio de manera contenida: una conferencia de prensa, con poca militancia, donde pidió el voto y apuntó a los indecisos. La relación entre ambos oscila entre la distancia y la cordialidad, propia de la coyuntura, teniendo en cuenta las aspiraciones de Petri de ir por la gobernación en 2027, luego de la sorpresa que dio en las PASO del 2023 frente a Cornejo, con un resultado de 60% a 40% de los votos en favor del actual mandatario provincial. Bajo este escenario, aparecen dirigentes radicales disgustados con el acuerdo y presionando para que la UCR empiece a trabajar desde ahora por un candidato propio para retener el Sillón de San Martín.
“No podemos quedar a mitad de camino, el cambio que llegó lo hizo para quedarse. No tenemos dudas que si la Argentina abraza las ideas de la libertad cambiará definitivamente”, expresó Petri en el acto de cierre de campaña. Por su parte, Cornejo defendió al Presidente y llamó a la ciudadanía a ratificar el rumbo económico, para “evitar el regreso del populismo”.
De igual forma, dijo que de producirse una derrota “sin duda será una llamada de atención seria para el gobierno nacional”. También, hizo un análisis de cómo manejó Milei los acuerdos con las provincias. “Las elecciones de medio término van a ser un plebiscito y el gobierno nacional debe hacer todo lo posible para ganar esas elecciones. Si el Gobierno hacía alianzas amplias y generosas con los gobernadores, iba a ganar en 14 o 15 provincias. Bueno, eso no se ocurrió”, afirmó el gobernador, quien dijo darse por “satisfecho” si obtienen un resultado similar al del 2023 en Mendoza, de 10 puntos de diferencia. “De igual forma, aspiramos a ganar por más”, aclaró. Otro dato a destacar: en la legislativa del 2021, el oficialismo se impuso por más de 23 puntos sobre el peronismo.
Del otro lado, el primer candidato del peronismo, Emir Félix, actual presidente del PJ local, se despachó contra el oficialismo, en la figura del gobernador, y apuntó también contra la gestión mileísta. “Cornejo se puede aliar hoy con Milei, mañana con Del Caño y pasado con cualquier cosa”, señaló Félix, y añadió: “Ellos hablan de que lo peor ya pasó, pero todos los indicadores demuestran que lo peor está por venir si no cambian el rumbo”.
La oferta electoral opositora quedó atomizada; de hecho, para estos comicios se inscribieron ocho frentes electorales, por lo que las chances de que logren ingresar al Congreso son bajas. Así, perdieron la oportunidad, que sí mostró en la elección pasada, en 2023, La Unión Mendocina (Laum), de aglutinarse como frente opositor de peso, a pesar de comulgar en grandes líneas con Milei y de rechazar la gestión de Cornejo.
Por caso, en este tren quedó atrapado el Partido Demócrata y Pro, que decidieron ir separados: el primero, como Frente Libertario Demócrata, con Gabriel Sottile, como cabeza de lista, y el segundo, aliado a Provincias Unidas, con Jorge Difonso, como principal candidato. La sorpresa podría darla alguno de ellos, aunque hay quienes ponen las fichas en el hombre del Partido Verde, Mario Vadillo, el abogado que defiende el agua y a los consumidores, en medio de la puja por el desarrollo de la minería en Mendoza.
Este domingo Mendoza elegirá autoridades legislativas provinciales y nacionales con un padrón que supera 1,5 millones de electores. En total, funcionarán 4.445 mesas, distribuidas en 644 escuelas a lo largo de los 18 departamentos. En cuanto a la participación de los electores, hay estimaciones que la ubican en el 60%, lo que representaría una baja importante con las votaciones anteriores.